Unas de las principales causas que apuntan las parejas en consulta para no dedicarse tiempo de calidad es la falta de tiempo, el estrés, exceso de trabajo, cuidado de los hijos etc... Sin embargo, llegan las vacaciones donde podemos dejar aparcadas muchas responsabilidades y lo que aparecen son los conflictos y las separaciones. Evidentemente no les pasa a todas las parejas, si las relaciones de pareja son buenas, cuando termina el verano son mejores, pero si son malas, las vacaciones acaban pasando factura y terminan en separación.
¿Qué ocurre durante las vacaciones?
- Ocurre que pasamos más tiempo juntos.
- Ocurre que al tener más tiempo para compartir afloran los conflictos no resueltos.
- Ocurre que lo que nos molesta en el día a día, lo pasamos por alto y no comunicamos como nos sentimos y que es lo que nos ha molestado. En este punto me gustaría hacer un inciso, no solo es bueno comunicar lo que no nos gusta, también es recomendable decir lo que, si me gusta, es decir practicar el halago con tu pareja, esto ayuda bastante a no centrarnos siempre en lo que no nos gusta de nuestra pareja.
- Ocurre que en ocasiones las parejas se convierten en perfectos desconocidos.
- Ocurre que algunas parejas ponen altas expectativas en las vacaciones de verano y sino sale todo tan maravilloso como se esperaba, alguno de los miembros se frustra y le lleva al enfado y en consecuencia a discutir con su pareja.
- Ocurre que algún miembro de la pareja organiza las vacaciones sin tener en cuenta las preferencias del otro/a.
- Ocurre que las parejas con un alto grado de degaste lejos de producirse un acercamiento, se acentúan las peleas y los desencuentros.
Todos estos “ocurre que” pueden tener solución si:
- Consideramos las vacaciones un tiempo optimo para encontrarse y no soportarse.
- Aprovechamos el tiempo para compartir actividades que habitualmente no podemos.
- Promovemos reducir la reactividad negativa y promovemos la cercanía y la intimidad.
- Aprovechar la tranquilidad que nos brinda las vacaciones para aclarar lo que no está funcionando.
- Estar activamente juntos, es decir, permitirse apreciar y disfrutar de la compañía recíproca.
- Si las vacaciones son con niños no olvidemos buscar momentos exclusivos para la pareja.
- Si durante el año somos más padres que pareja, las vacaciones son un momento perfecto para reconectar con la pareja.
- Por ultimo y no menos importante: vive en las vacaciones y no en las redes sociales, esta bien hacer un poco de postureo vacacional pero no olvides disfrutar de la experiencia de modo personal y en pareja.
Detectar cuál es el verdadero trasfondo es clave para resolver el conflicto y lograr armonía. Si no puedes solo/a acude a un especialista experto/a en terapia de parejas.