Alejandro Carmelo Santana Álamo
Psicólogo y Psicoterapeuta
Psicólogo infantil y adolescentes
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Psicólogo infantil y adolescentes
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Empecé a interesarme en la psicología desde muy temprano. Por circunstancias personales que me tocaron vivir, he sentido la necesidad de comprender por qué sucedían muchas de las cosas que pasaban a mi alrededor. Cosas a las que no era fácil encontrar una explicación. Y me refiero aquí a vivencias tempranas que conllevan sentimientos de soledad y angustia en ocasiones, y que de alguna manera han influido en la trayectoria de mi vida .
Entendí que había cuestiones importantes en la vida a las que no se les da importancia en el día a día, y que son básicas en el desarrollo del ser humano. Esto lo vivo a día de hoy en mi labor como psicoterapeuta, donde intento crear un espacio donde sea posible acompañar al otro a la hora de resolver sus propias cuestiones, lejos de la soledad e intentando aliviar el sufrimiento que ésto puede suponer.
Con este propósito aún no tan definido, me licencié en psicología por la Universidad de La Laguna. Acabada la carrera y con más preguntas que respuestas, me inicié en un proceso de conocimiento personal que, tras muchas vueltas, me ha llevado al momento presente.
A la vez que me iniciaba en mi análisis personal e iba profundizando en el conocimiento de la psicoterapia y sus entresijos, estuve trabajando en proyectos sociales de rehabilitación y reinserción. Así he pasado por Proyecto Hombre, por el Programa de Personas Sin Hogar de Cáritas Diocesana de Canarias, el Proyecto CONVIVE en la Prisión Provincial del Salto del Negro y también como técnico de ejecución de medidas judiciales con menores, entre otros.
Todo ello me ha servido como experiencia y me ha aportado un conocimiento difícil de obtener en otros ámbitos.
Con este bagaje llegó el momento de trabajar más de lleno en el ámbito de la psicoterapia a nivel privado. Un espacio donde sin coerciones y desde una opción más libre por parte de la persona, es más fácil y productivo profundizar y sacar beneficios de la psicoterapia.
Así, entendiendo la psicoterapia como un viaje interior de autoconocimiento, me considero un buen copiloto partiendo desde mi propia experiencia y con un camino propio. Y es que se puede considerar a la enfermedad como resultado de aquellas dificultades, problemas y conflictos que nos encontramos en nuestra trayectoria vital. La enfermedad se expresa a través de todo tipo de síntomas como depresión, ansiedad, angustia, dolor, etc., motivos suficientes como para preguntarnos que nos está ocurriendo e ir tomando consciencia del momento presente.
Teniendo en cuenta el malestar que producen los síntomas, en muchas ocasiones es prioritario rebajar la severidad e incidencia de éstos para luego ir profundizando en las causas y motivos que dan lugar a ello.
A nivel teórico y práctico he estado indagando a través de varios modelos. Partiendo desde el modelo cognitivo conductual desde los inicios en la Facultad de Psicología, consideré que siendo muy práctico e interesante dejaba muchas preguntas sin resolver. Pasé luego a interesarme por el Psicoanálisis, al que he dedicado bastante tiempo en mi formación. Además he probado en otros modelos como el Psicodrama, más relacionado con la psicoterapia grupal. Todo ello partiendo de que ningún modelo o escuela psicológica no tiene todas las respuestas, y que el objetivo principal de la psicoterapia es el alivio de las dolencias y la resolución de los problemas del paciente.
La prioridad está en la persona y los modelos ofrecen herramientas y puntos de vista para la consecución de dichos objetivos.
Entendí que había cuestiones importantes en la vida a las que no se les da importancia en el día a día, y que son básicas en el desarrollo del ser humano. Esto lo vivo a día de hoy en mi labor como psicoterapeuta, donde intento crear un espacio donde sea posible acompañar al otro a la hora de resolver sus propias cuestiones, lejos de la soledad e intentando aliviar el sufrimiento que ésto puede suponer.
Con este propósito aún no tan definido, me licencié en psicología por la Universidad de La Laguna. Acabada la carrera y con más preguntas que respuestas, me inicié en un proceso de conocimiento personal que, tras muchas vueltas, me ha llevado al momento presente.
A la vez que me iniciaba en mi análisis personal e iba profundizando en el conocimiento de la psicoterapia y sus entresijos, estuve trabajando en proyectos sociales de rehabilitación y reinserción. Así he pasado por Proyecto Hombre, por el Programa de Personas Sin Hogar de Cáritas Diocesana de Canarias, el Proyecto CONVIVE en la Prisión Provincial del Salto del Negro y también como técnico de ejecución de medidas judiciales con menores, entre otros.
Todo ello me ha servido como experiencia y me ha aportado un conocimiento difícil de obtener en otros ámbitos.
Con este bagaje llegó el momento de trabajar más de lleno en el ámbito de la psicoterapia a nivel privado. Un espacio donde sin coerciones y desde una opción más libre por parte de la persona, es más fácil y productivo profundizar y sacar beneficios de la psicoterapia.
Así, entendiendo la psicoterapia como un viaje interior de autoconocimiento, me considero un buen copiloto partiendo desde mi propia experiencia y con un camino propio. Y es que se puede considerar a la enfermedad como resultado de aquellas dificultades, problemas y conflictos que nos encontramos en nuestra trayectoria vital. La enfermedad se expresa a través de todo tipo de síntomas como depresión, ansiedad, angustia, dolor, etc., motivos suficientes como para preguntarnos que nos está ocurriendo e ir tomando consciencia del momento presente.
Teniendo en cuenta el malestar que producen los síntomas, en muchas ocasiones es prioritario rebajar la severidad e incidencia de éstos para luego ir profundizando en las causas y motivos que dan lugar a ello.
A nivel teórico y práctico he estado indagando a través de varios modelos. Partiendo desde el modelo cognitivo conductual desde los inicios en la Facultad de Psicología, consideré que siendo muy práctico e interesante dejaba muchas preguntas sin resolver. Pasé luego a interesarme por el Psicoanálisis, al que he dedicado bastante tiempo en mi formación. Además he probado en otros modelos como el Psicodrama, más relacionado con la psicoterapia grupal. Todo ello partiendo de que ningún modelo o escuela psicológica no tiene todas las respuestas, y que el objetivo principal de la psicoterapia es el alivio de las dolencias y la resolución de los problemas del paciente.
La prioridad está en la persona y los modelos ofrecen herramientas y puntos de vista para la consecución de dichos objetivos.
Alejandro Carmelo Santana Álamo