La Medicina de Familia es una especialidad de la Medicina que requiere una formación M.I.R (médico interno residente) de cuatro años tras acabar el grado de licenciatura. Esta formación se realiza en los Centros de Salud y en el Hospital, en distintas áreas de conocimiento referidas tanto a la salud física como a la salud mental.
Proporciona atención sanitaria continua e integral al individuo y a la familia, abarca todas las edades, géneros y problemas clínicos incluido patología mental menor: depresión, ansiedad, duelos, problemas psicosomáticos, etc.
Se diferencia de otras especialidades porque tiene una visión global del individuo con una perspectiva de todos los aspectos que influyen en su estado de salud y /o enfermedad: físicos, psicológicos o del entorno social, familiar, y laboral.
Abarca no solo los aspectos curativos con respecto a las enfermedades sino también aspectos de prevención de la enfermedad y de promoción de hábitos de vida saludable fomentando la responsabilidad en el autocuidado.
El médico de Familia es un especialista en personas cuyo área de conocimiento abarca a la PERSONA COMO UN TODO, donde cuerpo, mente y entorno interactúan y se influyen entre sí.
Estas interacciones pueden favorecer o perjudicar el estado de salud o enfermedad. Una enfermedad física puede producir alteraciones psicológicas y éstas una enfermedad física, y a su vez un entorno desfavorable familiar, laboral, o económico puede producir enfermedad física y/o mental.
La psicoterapia es la creación de un espacio entre un profesional o “terapeuta” y un sujeto necesitado de ayuda, para promover cambios. Un espacio de seguridad, de confianza, de escucha, de apoyo, de nutrición de alivio, para crecer y al mismo tiempo sanar.
Existen muchos tipos y modelos de psicoterapia. Dentro de las Psicoterapias humanistas se encuentra la Terapia de Gestalt que comparte una visión esperanzada y optimista del ser humano que tiende a su autorealización, plenamente responsable, capaz de elegir en cada momento lo mejor para su su desarrollo óptimo en el aquí y ahora.
Desarrolla una perspectiva unificadora y holísitica del ser humano. Incluye el funcionamiento del cuerpo, las emociones, el pensamiento, el espíritu y el ambiente con el que interactúa, afectándolo y siendo afectado por él.
Incita al autoconocimiento y a la aceptación del individuo tal como es y a no querer cambiar para encajar con un modelo determinado.
Medicina de Familia y Terapia Gestalt se integran, se suman, se potencian y coinciden en su perspectiva humanista, holística, y en el propósito de aliviar el sufrimiento humano. Ambas tienen como pilar fundamental la calidad de la relación entre terapeuta-cliente- paciente.
Con su acompañamiento el médico de familia y terapeuta gestalt proporciona:
Atención:
integral de las dimensiones física , psicológica y social.
personalizada, centrada en la persona según sus necesidades y etapa del ciclo vital.
a la salud mental: depresión, duelo, ansiedad, trastornos del sueño, somatizaciones diversas, dificultades adaptativas en relación a momentos vitales estresantes: separación, diagnóstico reciente de alguna enfermedad, problemas laborales….. etc
Apoyo psicológico a los procesos emocionales que generan las enfermedades físicas
Cardiovasculares: Hipertensión arterial, Angina de pecho e infarto de miocardio.
Endocrino-metabólicas: Sobrepeso y obesidad, diabetes mellitus, enfermedades del tiroides, etc.
Digestivas: Colon irritable, dispepsia, enfermedad de Chron, Colitis ulcerosa….
Respiratorias: Asma, EPOC
Neurológicas: Migraña, cefalea tensional, enfermedades neurodegenerativas.
Autoinmunes: Lupus eritematoso sistémico, artritis reumatoide, etc.
Osteomusculares: fibromialgia, contracturas..
Dermatológicas: psoriasis, alergias, urticaria….
Procesos oncológicos
Prevención del proceso de enfermar facilitando la promoción de HÁBITOS DE VIDA SALUDABLE: alimentación, ejercicio físico, higiene del sueño, respeto a los ritmos circadianos, higiene mental, respiración consciente, corrección postural, mindfulness, visualizaciones, etc.
Medicina de Familia y Psicoterapia proporciona atención y apoyo a personas sanas que quieren seguir creciendo como seres humanos y a personas con trastornos mentales menores, y/o en enfermedades físicas en la que potenciar todos los recursos puede optimizar la recuperación de la salud.
